Las empresas deben prevenir y eliminar el trabajo infantil en sus cadenas de suministro y garantizar que todos los niños tengan acceso a la educación y no se vean obligados a trabajar para sobrevivir
Según las Naciones Unidas, la experiencia de las tres últimas décadas ha demostrado que el trabajo infantil puede eliminarse si se abordan sus principales causas, sin embargo, en la actualidad, 160 millones de niños siguen trabajando. Es decir, casi uno de cada diez niños en todo el mundo. Las regiones de África, Asia y el Pacífico juntas alcanzan la cifra de casi nueve de cada diez niños en situación de trabajo infantil en todo el mundo. La población restante se divide entre las Américas (11 millones), Europa y Asia Central (6 millones) y los Estados árabes (1 millón). En términos de incidencia, el cinco por ciento de los niños están en situación de trabajo infantil en las Américas, el cuatro en Europa y Asia Central, y el tres en los Estados Árabes.
En Colombia entre octubre y diciembre del 2022 el DANE registró que, la mayor concentración de niños, niñas y adolescentes que trabajan, se presentó en el rango de 15 a 17 años con 70,1%, mientras que la población de 5 a 14 años fue el 29,9%. Adicionalmente se estima que salieron de esta condición cerca de 139.000 menores, registrando una tendencia baja en la última década.
Para combatir el trabajo infantil reconocer las buenas prácticas y replicarlas en todo el territorio es un trabajo de sensibilización y protección de infantes y adolescentes. Min Trabajo propuso el año anterior que “Para llegar a una tasa del 4.7% al finalizar este cuatrienio, hay que sacar de esta práctica a más de 100 mil niños, es una meta significativa, pero se requerirá de la articulación de los diferentes actores para poder lograrla”, aseguró la subdirectora de Protección Laboral de la Dirección de Derechos Fundamentales del Ministerio del Trabajo, Janeth Santiago Muñoz.
Los Objetivos para Vivir Mejor y el trabajo infantil
Según el artículo 32 de los derechos de los niños por UNICEF dice: Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a estar protegidos contra la explotación económica por parte de otra persona, cualquier trabajo que pueda ser peligroso, afectar su salud mental, física y emocional o entorpecer su educación. No pueden trabajar hasta que cumplan una edad mínima. En Colombia solo están autorizados para trabajar los adolescentes mayores de 15 años, bajo reglas claras sobre el horario y otras condiciones de trabajo
Los Objetivos Para Vivir Mejor (OVM) proporcionan a todas las personas un papel en la obtención de un mejor mañana. Los Objetivos sugieren acciones personales que cualquiera en el mundo puede realizar para apoyar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Los OVM realizan 5 “invitaciones” para actuar y que las personas los apliquen en su estilo de vida.
Estos OVM invitan desde conocer los factores de pobreza a nivel local, hasta acciones concretas como incentivar a los niños a continuar la escuela. Los OVM #4, #10, #16 y el #17 ayudarán a combatir desde pequeñas acciones el trabajo forzado en la primera infancia, ya que este es un obstáculo para una vida plena, sana y digna.
El trabajo infantil impide que los niños tengan acceso a una educación adecuada, lo que limita sus oportunidades futuras y perpetúa el ciclo de pobreza. Además, el trabajo infantil a menudo se asocia con condiciones laborales peligrosas y explotación, lo que puede tener efectos negativos en la salud y bienestar de los niños. Por lo tanto, trabajar para erradicar el trabajo infantil es esencial para permitir que los niños tengan acceso a una educación adecuada y crezcan en un ambiente seguro y saludable. Esto no solo beneficia a los niños involucrados, sino que también contribuye al desarrollo sostenible de las comunidades y la sociedad en general.
Las empresas y el trabajo infantil
La importancia de que las empresas luchen contra el trabajo infantil es por algunas de las siguientes razones. En primer lugar, el trabajo infantil es una violación de los derechos humanos, perjudicial para la salud y el bienestar de los niños.
En segundo lugar, el trabajo infantil perpetúa el ciclo de pobreza al limitar las oportunidades educativas y laborales de los niños. Esto puede tener efectos negativos en su futuro y en el desarrollo económico de las comunidades. Por último, las empresas que utilizan trabajo infantil pueden dañar su reputación y enfrentar consecuencias legales y financieras.
Las empresas tienen la responsabilidad social de garantizar que sus operaciones no causen daño a las personas ni al medio ambiente. Luchar contra el trabajo infantil es un paso importante para cumplir con esta responsabilidad social y contribuir al desarrollo sostenible de las comunidades donde operan. Algunas estrategias importantes son:
- Establecer políticas claras y comprometerse a no utilizar trabajo infantil en su cadena de suministro.
- Realizar auditorías en la cadena de suministro para detectar posibles casos de trabajo infantil.
- Trabajar en colaboración con organizaciones y comunidades locales para mejorar las condiciones de vida y educación de los niños.
- Proporcionar alternativas laborales a los padres de los niños, para que no dependan del trabajo infantil para sobrevivir.
- Implementar sistemas de monitoreo y seguimiento para garantizar el cumplimiento de las políticas establecidas.
Desde CECODES trabajamos en la promoción de los derechos humanos, la justicia social y el desarrollo sostenible. Estamos comprometidos por erradicar el trabajo infantil, implementado iniciativas como investigación y análisis sobre el trabajo infantil en Colombia con el objetivo de identificar las causas subyacentes para desarrollar soluciones efectivas. Así mismo implementar campañas de sensibilización para concientizar a las personas sobre los efectos negativos del trabajo infantil en los niños y la sociedad, para promover la importancia de la educación y el desarrollo infantil.