Por: Sergio Rengifo Caicedo
En la era digital, donde tenemos a nuestra disposición gran cantidad de información de todo tipo, la desinformación se ha convertido en un riesgo para la sostenibilidad empresarial. Los inversionistas, clientes, gobiernos y diversos grupos de interés están reclamando la transparencia y la responsabilidad de las organizaciones, ya que la propagación de noticias falsas, datos incorrectos y teorías conspirativas representan un riesgo significativo para las empresas comprometidas con la sostenibilidad.
No es casualidad que para el año 2024, en el Informe de Riesgos Globales del Foro Económico Mundial, el primer riesgo latente para los próximos dos años es la información errónea y la desinformación. Este riesgo, es tan silencioso que la mayoría de las veces viene bajo la apariencia de información legítima y por esto puede debilitar los esfuerzos, consciente e inconscientemente, de las empresas por adoptar prácticas sostenibles.
Uno de los mayores impactos de la desinformación radica en su capacidad para afectar la confianza entre diversos públicos de interés. La confianza es un activo invaluable, las empresas que son percibidas como poco confiables enfrentan desafíos significativos en la retención y atracción de clientes, inversores y talento humano.
Además, la desinformación puede obstaculizar los esfuerzos de colaboración y cooperación entre empresas, gobiernos y organizaciones de la sociedad civil y es evidente que, para abordar los desafíos globales como la emergencia climática, la pérdida de la biodiversidad y la creciente desigualdad, la propagación de información falsa puede obstaculizar la puesta en marcha de soluciones sostenibles.
Por esto, desde CECODES y junto con su iniciativa, la Red de Periodistas por el Desarrollo Sostenible, creada en el año 2012, se considera que la mejor estrategia para abordar este desafío es la unificación del lenguaje de la sostenibilidad entre los diversos actores. Los lineamientos y hojas de ruta acordadas a nivel mundial, como el Acuerdo de París, el Acuerdo de Montreal sobre biodiversidad, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Vision 2050, implican un compromiso de todos los sectores, incluido el empresarial, para definir sus propias hojas de ruta conforme a estos lineamientos.
En este sentido, las empresas deben priorizar la transparencia y la comunicación clara y honesta con todos sus grupos de interés. Además, deben invertir en transferencia de conocimiento, tanto dentro de sus organizaciones como en las comunidades donde operan para que todos estemos enfocados en el mismo objetivo. Finalmente, las empresas deben colaborar con otras partes interesadas, incluidos gobiernos, organizaciones sin fines de lucro y medios de comunicación, para desarrollar estrategias diferenciales para abordar la desinformación. Al trabajar articuladamente, se puede construir un futuro para que la información sea fuente de inspiración. CECODES acompaña a las empresas en este objetivo siendo un actor neutral para ayudar a generar confianza a través de una comunicación asertiva basada en hechos y cifras que contribuyen a superar los riesgos globales con acciones locales como se puede evidenciar en la hoja de ruta la Visión 2050 Colombia.
La desinformación representa un nuevo desafío mundial para la sostenibilidad empresarial, pero a la vez una gran oportunidad para fortalecer la estrategia empresarial donde se comunica con verdad, transparencia y responsabilidad.